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martes, 11 de agosto de 2015

Australia

La ley de propiedad intelectual australiana reglamenta los derechos de autoría de una obra y establece que no son los mismos que los de la traducción de la obra. El traductor es, en principio, el titular de los derechos de la traducción en cuanto no los haya cedido por contrato. No se especifica qué tipo de cesión hace. El traductor tiene el copyright de la traducción, pero puede haber acordado cobrar regalías solo por una edición determinada (y no por publicaciones posteriores), etc. con lo cual existe un rango amplio de acuerdos en esta área.
Hay una asociación específica para traductores literarios, la AALITRA (Australian Association for Literary Translation), que apunta a la visibilidad profesional y el intercambio entre traductores. Ha instituido recientemente un premio a la traducción literaria y es miembro observador de la FIT. Lamentablemente, en su página no especifica cuáles son las condiciones para ser miembro de la asociación. También existe el AUSIT (The Australian Institute of Interpreters and Translators Inc.), que nuclea a traductores e intérpretes a nivel nacional y busca mejorar la calidad de los servicios profesionales ofreciendo cursos, talleres, impulsando la adopción de buenas prácticas y un código de conducta profesional.
Una tercera organización, la NAATI (National Authority for the Accreditation of Translators and Interpreters), otorga acreditación nacional a los profesionales de la traducción e interpretación y establece los estándares para el ejercicio profesional. Para actuar profesionalmente en cualquier cuestión de índole oficial (ante tribunales, para traducir documentos oficiales, etc.) es necesario estar acreditado ante este organismo.
Hay también un sindicato, Translators and Interpreters Australia. Pertenece a la asociación de profesiones liberales Professionals Australia. Defiende los intereses de los traductores e intérpretes, hace relevamientos de la industria, brinda orientación respecto del tipo de contrato que rige la relación laboral y/o tipos de estructura para trabajo independiente, de asuntos impositivos, de cuestiones de responsabilidad legal (seguro profesional), da asesoramiento para gestión de proyectos de traducción, defiende la propiedad intelectual de los traductores, etc.



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